Crónica Vampírica (Introducción)

Tema: Crónica Vampírica (Introducción) Sáb Jul 26, 2008 10:48 pm

Introducción

Eterno Ajedrez.

Un tablero de ajedrez vagamente iluminado por una tintineante lámpara de neón estaba ubicado como el centro exacto del anticuado salón, las sombras se apoderaban del mismo y ni siquiera se podía vislumbrar el rostro de ambos jugadores, el primero llevaba la ventaja, esbozando una invisible sonrisa para su joven e inexperto participante; la mano del consiguiente, después de mucho meditar, surgió de entre las sombras y fue iluminada, una mano más que pálida, era grisácea, con el brazo recubierto de cuero negro, las venas se le resaltaban en un tono violetáceo y sus uñas estaban tan negras como la oscuridad y un tanto maltratadas, movió una pieza que hizo desvanecerse la presumida sonrisa del anciano.

Sin embargo éste permaneció en calma, no desesperó e hizo su próximo movimiento, un movimiento que terminaría siendo un error, parecía que no hubiese sido uno de sus movimientos, como si ambos jugadores fueran peones en la propia partida que estaban jugando, en lugar de los reyes, parecían estar siendo comandados por unos finísimo hilos invisibles al ojo humano... y vampírico.

Un quejumbroso sonido irrumpió el silencio, aparentemente el anciano comenzaba a toser, la edad ya comenzaba a afectarle un poco, ¿se habría opacado su habilidad junto con sus sentimientos?, No... no correspondía, se sacudió el polvoriento traje de una tonalidad gris, que se pudo denotar cuando realizó su movimiento, sus manos, a diferencia de las de su contrincante, estaban meticulosamente esterilizadas, irradiaban pulcritud, parecía un maníaco de la limpieza, sin embargo no parecían comunicarse mientras jugaban, era un juego silencioso que ahogaba en un aire de tensión el salón, como si sus vidas dependieran del juego, pero estaban a salvo, ya que aún ninguno de los dos había llegado al Rey del otro.

Los movimientos del anciano se volvía cada vez más inútiles, y comenzaban a caer sus peones y alfiles a medida que el más joven procedía con sus acciones, pero el anciano tuvo un momento de lucidez, y fue allí cuando decidió aferrarse con todas sus fuerzas a la gratificante idea de vencer, fue ahí cuando decidió no perder más piezas, y comenzar a hacer que el otro perdiese las suyas, durante varias horas de la misma noche, una noche helada cuya tensión la volvía caliente, siguieron con su partida mortal de ajedrez, el sol se asomaba y decidieron dejar las piezas como estaban, parecía de no creer, cuando el joven más confianza se tenía para vencer, el anciano decidió dejar a un lado su arrogancia y usar la sabiduría, para equilibrar la balanza y dejar la partida, momentáneamente, en un empate...

NOTA: Esta introducción hace una referencia a la crónica iniciada por el anterior Master, que daría un giro para cambiar la crónica de "Dominio de la Ciudad" que se llevaba hasta el momento; Ahora se hará como una crónica realmente, sin embargo, seguirá pendiente el sistema de obtención de experiencia por el Dominio de Noshville, además de la oportunidad de participar en escenas y hacer aún más experiencia allí. Que conste que está basado en cómo quedó equilibrado el Dominio cuando el anterior Master decidió postear por última vez. Saludos.